martes, 7 de septiembre de 2010

cómo escribir

a mi ojo izquierdo

No pensar,
no darnos ni un minuto para,
no levantar la cabeza porque ya sabemos lo que,
escribir,
escriturar,
tomar nota,
levantar acta,
apuntalar los metros cuadrados en que consiste el mundo,
luego volver a escribirlo y mirarlo
con ese ojo que tengo y que es marrón
y que todo lo ve gris y que se fija,
se cuestiona, se detiene,
lame otra vez lo ya lamido,
mira otra vez lo ya mirado,
el ojo que abrirá de nuevo el mundo
y yo que diré entonces 
esto 
y esto
y el poema
y la moneda
y la cucharilla que tiembla
y la pelusa en el cristal
y el excremento
y el tacto por ejemplo de una tirita en nuestra piel.


nota: poema hecho poema a partir de texto que está en una entrada un poco más antigua y que nunca tuvo intención de poema pero que resulta que una vez leído me gusta lo suficiente como para dejarlo vivir aunque no lo suficiente como para sentirme orgulloso del trabajo bien hecho.

1 comentario: